La Conquista del Castillo 2024

Hay carreras a las que no se puede faltar, parece una frase hecha, una frase para quedar bien, pero es que hay varias pruebas a las que es innegociable la asistencia. La Conquista del Castillo es una de ellas, y es que se juntan muchas cosas que le dan esta categoría, la organización es de 10, desde la entrega de dorsales,  aparcamiento cerca de la salida, consigna, duchas, autobuses que te traen de vuelta, y algo más, una cosa que la hace única,  la meta, donde está enclavada,  a pies del Castillo y Basílica de Javier.

Así que con esas premisas llega el 19 de mayo, fecha de una séptima edición que en realidad es la sexta, ya que el 2020 y 2021 fue suspendida por esa maldita pandemia.

La mañana pinta fea, mientras esperamos en el coche, las trombas tormentosas se suceden y todo hace indicar que la carrera va a ser pasada por agua.

Tras dejar las cosas en consigna, pequeño paseo para esperar al pistoletazo de salida.

El ritmo de salida es comedido, la subida a la altura del Restaurante Yamaguchi si se hace a un ritmo elevado sabes que puede ser un mazazo que pase factura los siguientes 5 kilómetros. 

Así que despacio y buena letra, e ir pillando ritmo hasta el km 5,2 , mientras continúa la subida, contenida y que nos deja a pies de la última subida fuerte, y a partir de ahí una bajada que permite bajar la media, y lo más importante, disfrutar de la llegada en el mejor lugar posible. 

 

El tiempo que me sale es algo inferior al de hace 2 años,  y esto me da moral, creo que aunque lejos de ese estado de forma, el resultado es mejor de lo esperado. Es muy importante el aspecto psicológico, y estos resultados y sacar algún entrenamiento en el que se vean ritmos vivos pueden ayudar a remontar. 

También es importante no llegar al agotamiento mental y por eso hay que saber acabar esta primera mitad de año y recargar pilas para los verdaderos objetivos del año.